Atender consultas de clientes con un servicio profesional y de alta calidad, asegurando su resolución.
Gestionar soporte técnico complejo con empatía y paciencia vía chat o reuniones en línea.
Diagnosticar y resolver problemas técnicos del producto o entorno del cliente, de forma autónoma o con el equipo de ingeniería.
Documentar incidentes y soluciones para mejorar la base de conocimiento y el producto.
Proponer mejoras en procesos de atención al cliente mediante iniciativas y retroalimentación.
Utilizar Intercom para una gestión eficiente y organizada del soporte.