1. Prospección de Clientes
Identificación de clientes potenciales: Buscar nuevos clientes mediante diversas técnicas como investigaciones de mercado, recomendaciones o bases de datos. También puede utilizar redes sociales o directorios comerciales.
Visitas a la zona de trabajo: Recorrer zonas específicas donde se cree que hay un mercado potencial, tocando puertas o acercándose a negocios.
2. Presentación y Demostración de Productos o Servicios
Explicar el producto o servicio: Dar información clara sobre lo que se está ofreciendo, adaptando el discurso a las necesidades del cliente potencial.
Demostraciones: En algunos casos, el vendedor puede realizar una demostración en vivo del producto o servicio.
3. Negociación y Cierre de Ventas
Negociación de precios: Ajustar ofertas o condiciones de venta según las necesidades del cliente, buscando un acuerdo que beneficie a ambas partes.
Cierre de la venta: Una vez que se llega a un acuerdo, se formaliza la venta, ya sea firmando contratos, realizando pagos o acordando entregas.
4. Gestión de Relaciones con Clientes
Seguimiento postventa: Después de la venta, el vendedor externo puede hacer seguimiento para asegurarse de que el cliente esté satisfecho y solucionar problemas o dudas.
Fidelización: A través de atención constante y ofreciendo promociones o nuevos productos, el vendedor busca que el cliente vuelva a comprar.
5. Cumplimiento de Objetivos de Venta
Cumplimiento de metas: El vendedor externo debe cumplir con cuotas o metas de ventas, lo cual puede implicar trabajar bajo presión para alcanzar los objetivos establecidos.
Informe de resultados: Los vendedores externos suelen reportar su rendimiento a sus superiores, proporcionando informes sobre ventas, visitas y clientes potenciales.
6. Manejo de Objeciones
Resolver dudas: A menudo, el vendedor debe lidiar con objeciones o preocupaciones del cliente (precio, calidad, necesidad del producto, etc.). Para ello, debe estar preparado para argumentar y proporcionar soluciones.
7. Trabajo de Campo
Visitas regulares: El trabajo de un vendedor puerta a puerta implica estar constantemente en la calle, visitando clientes potenciales, lo que requiere habilidades para comunicarse, gestionar el tiempo y, a veces, una buena resistencia física.
9. Manejo de Herramientas Tecnológicas
Uso de dispositivos móviles y aplicaciones: Para registrar las visitas, llevar un control de las ventas y generar presupuestos o cotizaciones rápidas, muchos vendedores externos usan aplicaciones de CRM (Customer Relationship Management), GPS, entre otras.