Emisión, renovación, modificación y cancelación de pólizas.
Control de vigencias, primas, deducibles y límites asegurados.
Explicación a clientes de productos, coberturas y exclusiones.
Elaboración de propuestas técnicas.
Recomendar coberturas adecuadas según el perfil de riesgo.
Visitas a clientes para explicar soluciones aseguradoras.
Recepción y análisis de avisos de siniestro.
Acompañamiento en la recolección de soportes y seguimiento al proceso de indemnización.
Configurar pólizas a la medida: multirriesgo, transporte, responsabilidad civil, cumplimiento, entre otros.
Definir condiciones particulares y cláusulas especiales.
Evaluar los riesgos específicos de cada empresa (industriales, comerciales, logísticos, etc.).