Preparar el material: Recibir y verificar que la materia prima (lamina o alambron de aluminio) cumpla con los requisitos del trabajo.
Ajustar la maquinaria: Montar los troqueles en la máquina, calibrar la presión y ajustar la alineación y velocidad para asegurar un trabajo preciso.
Operar el troquelado: Realizar el proceso de corte o estampado, siguiendo las especificaciones técnicas para lograr la forma deseada.
Inspeccionar la calidad: Realizar controles visuales y de medidas al producto terminado para asegurar que cumpla con los estándares de calidad establecidos.
Diligenciar registros: Documentar el proceso de producción, incluyendo el inicio, el final y cualquier incidencia que se presente.
Realizar mantenimiento: Llevar a cabo el mantenimiento preventivo y de rutina de la maquinaria para garantizar su buen funcionamiento y detectar fallas.
Coordinar el proceso: Colaborar con otros equipos de producción para cumplir con los tiempos de entrega y organizar el material troquelado para la siguiente etapa.
Mantener el orden: Asegurar la limpieza y el orden del puesto de trabajo.