Montar mesas con manteles, cubiertos, copas y servilletas.
Conocer los platos del día, promociones o cambios en el menú.
prenderse los ingredientes de los platos para responder dudas de clientes.
Anotar pedidos con precisión.
Preguntar sobre preferencias o alergias alimenticias.
Llevar la comida en el orden correcto (entrada, plato fuerte, postre).