Supervisar y coordinar el trabajo del personal administrativo:
Asigna tareas, establece horarios, programas y procedimientos de trabajo, y supervisa la ejecución de las mismas.
Gestionar recursos:
Controla inventarios de la unidad administrativa, gestiona material de oficina y realiza trámites administrativos.
Mantener la organización:
Gestiona el sistema de archivo, organiza y programa reuniones y citas, y prepara correspondencia y memorandos.
Apoyo administrativo:
Proporciona apoyo a diferentes departamentos, contribuye a la preparación de informes y garantiza el cumplimiento de las políticas de la empresa.
Comunicación y colaboración:
Coordina actividades con otros grupos o departamentos, se comunica con proveedores y contratistas externos, y asiste en la selección y contratación de personal.
Cumplimiento y seguridad:
Evalúa el desempeño del personal, realiza inspecciones de rutina y garantiza el cumplimiento de las normas de seguridad y salud en el trabajo.