Gestión de personal: Supervisar la contratación, formación, horarios y motivación del equipo de trabajo, asegurando que todos cumplan con los estándares de servicio.
Control de inventarios: Monitorear y gestionar el stock de alimentos, bebidas y suministros, asegurándose de que haya suficiente inventario y realizar compras cuando sea necesario.
Gestión financiera: Controlar los ingresos y egresos, elaborar presupuestos, analizar reportes de ventas y gestionar el flujo de caja.
Relación con los proveedores: Negociar precios y condiciones de compra con los proveedores, realizar pedidos de productos, y mantener relaciones comerciales a largo plazo.
Garantizar la calidad del servicio: Supervisar la experiencia del cliente, asegurándose de que el servicio, la comida y el ambiente estén a la altura de las expectativas