La logística es la disciplina empresarial que gestiona los flujos de productos, información y recursos desde su origen hasta su destino final, con el objetivo de llevar el producto o servicio adecuado, al lugar y momento oportunos, y al menor coste posible. Esto incluye la planificación, implementación y control de la adquisición, el almacenamiento, el transporte y la distribución de bienes, asegurando la satisfacción del cliente y la eficiencia operativa.
¿Qué implica la logística?
La logística abarca todas las actividades necesarias para que un producto llegue a su cliente:
Planificación: Definir los procesos y recursos necesarios para gestionar el flujo de bienes.
Gestión de Inventarios: Controlar y optimizar los niveles de existencias para satisfacer la demanda sin excesos.
Almacenamiento: Organizar y gestionar los almacenes donde se guardan los productos.