La Clínica Madre Bernarda basada en los principios del Evangelio brinda acompañamiento personalizado a los empleados, usuarios y familiares, Guarda especial respeto por las personas, costumbres, creencias, deseos y decisiones. Cada uno de los miembros podrá expresar libremente sus ideas, sin temor a ser señalado, burlado o castigado, si no son compartidas por los demás miembros. Toda persona es tratada como ser integro desde su parte física, social y espiritual, sin olvidar en ningún momento, desde lo técnico, la parte humana. En la práctica diaria profesional, la Clínica Madre Bernarda defiende los principios éticos, especialmente desde su práctica en salud: el secreto profesional y el respeto.